En cualquier momento puede surgir cualquier imprevisto: una reparación doméstica, una visita al dentista, un arreglo en el coche o una factura inesperada. Incluso simplemente se puede desear disfrutar de unas merecidas vacaciones o comprar un producto. Para todos estos casos está pensado el minicrédito rápido. Si deseas llegar cómodamente a final de mes y poder pagar sin problemas el alquiler, la hipoteca, el gas, el teléfono o la luz, puedes elegir el minicrédito adecuado a tus necesidades desde 50 a 500 euros. Tienes un mínimo de siete días para devolverlo sin intereses y generalmente hasta un máximo de 30.

Asimismo, no necesitas presentar nómina ni ningún tipo de aval. El único requisito es contar con una cuenta bancaria. Por lo demás, no se requieren ni comprobantes ni documentación alguna. Para que te hagas una idea, si pides un minicrédito de 500 euros, tan solo debes pagar un interés de 75 euros en el caso de que lo pagues en 10 días. Si, por el contrario, necesitas gastar los 30 días reglamentarios, entonces habrás de pagar 175 euros extra. En caso de que precises únicamente 50 euros, pagarás 11,35 euros por cinco días y 20,67 por 30.

Ten en cuenta, además, que para algunos tipos de minicrédito como las líneas de Creditomóvil, OK Money, Vía SMS, Dispon.es o Wonga se piden algunos requisitos extra. Así, en la mayoría de los casos se requiere que el titular sea mayor de dieciocho años o de veinticinco. En otras ocasiones se solicita no figurar en ningún registro de impagados o no disponer de una deuda superior a 1.000 euros. En casos concretos, como en el minicrédito de OK Money, es necesario contar con ingresos mensuales inferiores a 500 euros.

Para elegir el que mejor se adapte a tu situación personal puedes ir una a una por las diferentes páginas web de las compañías de minicréditos rápidos o recurrir a alguno de los comparadores especializados en los que puedes ver un poco más fácil las características y condiciones de cada compañía para tomar tu decisión de una forma más rápida y sin perder tiempo en ver las condiciones de empresas que probablemente no te encajen.

En cualquier caso estudia bien la cantidad que te hace falta y el plazo de devolución. Cuanto menos pidas y antes lo devuelvas menos pagarás de intereses. Un minicrédito es una buena solución sin papeleos como anticipo de ingresos pero puede complicar tu situación si no puedes devolverlo.

También puedes también salir de un apuro con algunas de las ofertas que suelen ofrecer algunas compañías de minicréditos para nuevos clientes en los que incluso tu primer crédito te puede salir gratis al no pagar intereses.